Un sorpresivo encuentro se dio este miércoles en Asunción. Fue entre la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el titular de la AFA, Claudio “Chiqui” Tapia, que se saludaron entre risas y buena sintonía, tras las fricciones públicas y los cruces en la Justicia entre la gestión libertaria y la asociación del fútbol por las sociedades anónimas en la liga local. Todo pareció confirmar la tregua que sonaba desde hace días. Hubo brindis y regalos en Luque, desde donde se manejan los hilos del fútbol sudamericano.
Las interpretaciones del acercamiento difieren según quien hable: desde la Casa Rosada dicen que las dos partes negociaron un acuerdo momentáneo, mientras que un dirigente de peso muy ligado a Tapia lo señaló como un triunfo y analizó que al Gobierno no le quedó otra salida tras la seguidilla de fallos adversos.
El evento que unió a la hermana del Presidente y al hombre fuerte del fútbol argentino se dio en el marco del Congreso de la FIFA, en el que se oficializaron las sedes para los Mundiales 2030 y 2034. La región mira con especial atención la cita de 2030, que se hará en España, Marruecos y Portugal, pero tendrá los partidos inaugurales en Sudamérica. La apertura será en Uruguay, que alojó la final de la primera Copa del Mundo en 1930, justo cuando se cumplen los 100 años, mientras que la Argentina y Paraguay debutarán de locales. En Buenos Aires, la sede será la cancha de River . Después el torneo se trasladará a Europa y el norte África.
Tapia y Karina Milei se conectaron desde la sede de la Conmebol, ubicada cerca del aeropuerto de la capital paraguaya, con el titular de la FIFA, Gianni Infantino, quien coordinó desde Suiza a todos los participantes del acto. La reunión marca una nueva etapa en el vínculo entre AFA y Gobierno.
Además de las fotos, también quedó ratificada esa intención en el discurso que brindó el titular de la AFA. “Quiero agradecerles a todos los funcionarios de mi país porque sin dudas desde el primer día no solo han realizado la tarea administrativa para que podamos postularnos, sino que lo han acompañado, como lo están haciendo acá presentes en Paraguay”, dijo, en un claro guiño a la funcionaria más influyente sobre Javier Milei.
Después hubo un paso por el escenario. En tierras de Alejandro Domínguez, mandamás de la Conmebol, “Chiqui” hizo de anfitrión para Karina Milei. “Secretaria”, le dijo para ayudarla a ubicarse en el escenario, más suelto con este tipo de eventos. Ella se río y se paró a su lado. “Muchísimas gracias, secretaria general, por haber acompañado desde el primer momento el sueño de los argentinos y las argentinas de poder ser sede de este mundial”, la elogió y para el final fue amable otra vez. “Le cedo la palabra”, dijo.
En un escenario de hombres, la hermana del Presidente agradeció a la FIFA. “Realmente es un honor que seamos sede para el Mundial 2030, para todos los argentinos. Les agradezco muchísimo que cuenten con nosotros, gracias”, se limitó a decir ella, de pocas apariciones públicas. Tras eso, se saludaron con un beso.
Hubo, además, un brindis. Y el titular de la AFA hizo todavía un gesto superior: le regaló a la funcionaria y al vocero Manuel Adorni, que viajó con ella, camisetas de la Selección, ploteada con sus nombres -por lo que la movida estaba orquestada desde antes- y con el número 2030. Los tres rieron para las cámaras y el Gobierno se encargó de difundir esas imágenes.
En las últimas semanas, y para llegar a las postales de este miércoles, se habrían dado gestiones entre funcionarios, dirigentes deportivos y hasta sponsors vinculados tanto a la AFA como al Gobierno.
A Milei le interesaba el desembarco de las SAD, pero no tanto como al expresidente Mauricio Macri, que veía una revancha de su intento frustrado, según fuentes cercanas al oficialismo. En el Gobierno desistieron de la posibilidad de intervenir la AFA por diferentes razones. La primera, y tal vez la más importante: evitar un tuit de Lionel Messi o de otras figuras del seleccionado, quienes en esta pelea están del lado de Tapia. Es decir, impedir la escalada de un conflicto de alto impacto popular y político. La segunda razón, mucho más dogmática: la intervención de una asociación civil no encaja en el relato sobre las libertades. Sería una contradicción que no pasaría tan fácilmente el filtro como otras tantas. También, la Casa Rosada recibió una serie de decisiones judiciales no favorables. Además, se agregó el aliciente de mostrar la organización, aunque sea de un partido, de una copa del mundo en nuestro país 52 años después.
Cercano al peronismo e incluso activo en la campaña presidencial a favor del entonces candidato de Unión por la Patria (UP), Sergio Massa, Tapia sintió que el Gobierno le declaró la guerra cuando, a través del DNU 70/2023, su primera medida de peso, quiso implementar el ingreso de capitales privados a los clubes locales. Entre los principales promotores de esta iniciativa se encontraban, además de los Milei y el expresidente Macri -socio de la Casa Rosada-, el secretario de Deportes, Daniel Scioli, y la diputada nacional Juliana Santillán, vinculada al empresario deportivo Guillermo Tofoni, quien también se movía como promotor de la iniciativa y está enfrentado desde hace tiempo con la conducción afista. Otro cercano al Gobierno es el exjugador Sergio “Kun” Agüero, que admira al Presidente.
