El titular del ejecutivo provincial cordobés  que estuvo enfrentado con el gobierno nacional por los recortes a los subsidios del transporte y los festivales de música, definió la actual situación como “crítica” y afirmó que “los números de pobreza se van a extender y no es culpa a de Milei, que ya agarró una situación muy difícil, casi con una hiperinflación en marcha”. “Milei hace medidas de shock y de ajuste que claramente hoy los gobernadores o intendentes estamos viendo cómo resolver para que no llegue en su total dimensión a los vecinos”, apuntó. En ese sentido, Llaryora remarcó que “ahora lo que hay que pensar es cuando estén los números de desempleo”. Y alertó: “Vean el plan productivo, siempre lo digo. Porque te estás jugando a este plan motosierra y licuadora y que en algún momento rebote. Pero si rebotaste todo el tejido social productivo, capaz que el rebote no se dé. En algún momento la esperanza se va a acabar”. Llaryora afirmó que el narcotráfico es un tema que lo ocupa hace tiempo: “Cuando uno estudia este tema y te toca ir a otros país a estudiar este tema, por ejemplo en Colombia, empiezan en una ciudad, ganan la batalla en una ciudad y después se extienden a otra”. “Lo que nosotros no tenemos que hacer es que ganan la batalla en Rosario”, resaltó. En ese sentido, se mostró a favor de “cambiar leyes, si esas reformas son importantes para actuar rápidamente”. “No podemos mirar para otro lado”, subrayó, al tiempo que también dijo que “el Ejército ya son las fuerzas de la democracia y tienen que ayudar a combatir el narcotráfico”. El gobernador, por último, advirtió que las consecuencias del ajuste pueden ser problemáticas y funcionales al crimen organizado. “Antes teníamos pobres con trabajo y ahora vamos a tener pobres sin trabajo. Esa gente que se queda sin empleo y en la marginalidad puede tener en el narcotráfico un aliado, o como dicen, a los soldaditos. Hay que luchar contra eso”, concluyó.